El estrés y otros factores pueden perjudicar la función sexual y causar disfunción eréctil.
En este artículo, aprenderá cómo afecta el estrés a la salud física, mental y sexual del hombre y aprenderá técnicas de control del estrés para mejorar la calidad de vida.
Según la terminología médica, la disfunción eréctil, también conocida como impotencia, es la incapacidad de lograr y mantener una erección el tiempo suficiente para permitir una actividad sexual satisfactoria.
En España, hasta el 54% de los hombres están afectados por disfunción sexual, pero casi todos los hombres sufren falta de erección en algún momento de su vida.
Características de la disfunción eréctil psicológica
Los científicos han demostrado que el estrés tiene un impacto directo en la función eréctil. Los efectos del estrés emocional pueden ser diametralmente opuestos.
El estrés leve provoca excitación y un aumento de la libido. Los expertos lo atribuyen a la necesidad masculina de conquistar y demostrar su fuerza. En este caso, las relaciones sexuales ayudan a relajarse y a restablecer el equilibrio mental.
Los conflictos prolongados y los problemas vitales que se arrastran durante mucho tiempo aumentan el estrés y suprimen el deseo sexual y la actividad en la cama.
El estrés desempeña un papel importante en los problemas de disfunción eréctil
A veces, un hombre puede perder completamente el interés por los miembros del sexo opuesto. La pregunta de si el estrés severo tiene un efecto sobre la potencia puede responderse inequívocamente de forma afirmativa.
Al intentar mantener relaciones sexuales, el cuerpo puede negarse debido a la tensión interna.
Consecuencias de los choques psicológicos para los hombres
El estrés afecta tanto al estado mental como al físico.
Un hombre puede notarlo en sí mismo:
- Falta de erección y eyaculación retardada o acelerada
- Reducción o desaparición del deseo sexual
- Ausencia de eyaculación u orgasmo
El miedo a estar en una posición incómoda delante de una mujer lleva a los hombres a rechazar la intimidad sexual, alegando fatiga o falta de ánimo.
El vínculo entre estrés y sexualidad
El estrés forma parte de nuestros mecanismos biológicos de supervivencia.
La respuesta al estrés es la forma en que reaccionamos ante factores reales o percibidos.
Dos hormonas importantes, la adrenalina y el cortisol, intervienen en la respuesta de lucha o huida.
La adrenalina, también conocida como epinefrina, es producida por las glándulas suprarrenales y actúa inmediatamente para prepararnos para el peligro.
Una vez que la adrenalina ha alcanzado su punto máximo, el cortisol se libera al cabo de unas horas.
El cortisol nos mantiene en un estado menos agudo pero aún estresado hasta que el peligro ha pasado.
El estrés crónico prolongado hace que las hormonas diseñadas para protegernos del peligro empiecen a causar problemas relacionados con el estrés, como hipertensión, enfermedades vasculares y cardíacas y, como consecuencia, disfunción eréctil.
Un estudio destaca los beneficios de la gestión del estrés para mejorar la función eréctil y recomienda que un plan de acción de gestión del estrés forme parte del tratamiento de la impotencia.
Causas psicológicas de la disfunción eréctil
Además del estrés, la impotencia también puede estar asociada a otros trastornos psicológicos.
Ansiedad
La ansiedad desencadena la respuesta al estrés y puede provocar un aumento de la frecuencia cardíaca, hipertensión arterial y respiración acelerada.
Hasta el 42% de las personas con impotencia sexual también declararon sufrir trastornos de ansiedad.
Los investigadores creen que la ansiedad afecta al sistema nervioso simpático, responsable del desarrollo y mantenimiento de las erecciones.
La ansiedad crónica que conduce a la disfunción eréctil puede verse exacerbada por una pérdida de autoconfianza sexual, que puede desencadenar una depresión secundaria.
En general, si las erecciones nocturnas o matutinas son más fuertes que con la pareja, esto puede indicar que el problema de erección está causado, al menos en parte, por la ansiedad psicógena.
Abuso, trauma sexual o trastorno de estrés postraumático
Las personas con antecedentes de abusos, traumas o trastorno de estrés postraumático tienen un mayor riesgo de disfunción sexual.
Aunque esto puede dificultar la búsqueda de la ayuda necesaria, es importante encontrar un profesional médico o de salud mental de confianza que le ayude a superar los abusos.
Estrés laboral y financiero
Los problemas en el trabajo o con las finanzas también causan un estrés psicológico importante.
La pérdida involuntaria del empleo y las dificultades económicas son factores de riesgo importantes para desarrollar una disfunción eréctil.
Se ha demostrado que el deseo sexual puede disminuir cuando una persona pierde su trabajo o se ve amenazada.
Depresión
La depresión está causada por un desequilibrio químico de los neurotransmisores, como la serotonina y la dopamina, en el cerebro.
Varios estudios han encontrado una relación entre la disfunción eréctil y un mayor nivel de síntomas depresivos.
Mientras que las mujeres tienen el doble de probabilidades de ser diagnosticadas de depresión, los hombres tienen cuatro veces más probabilidades de morir por suicidio, lo que sugiere que muchos hombres no son diagnosticados de depresión.
Los síntomas de la depresión son diferentes en los hombres. Su depresión se expresa hacia el exterior y puede desembocar en agresividad, irritabilidad, comportamientos violentos o de riesgo, lo que tiene consecuencias más graves para la familia.
Los hombres que sufren depresión tienen menos probabilidades de interactuar positivamente con su pareja y sus hijos y son más propensos a mostrarse negativos y retraídos.
El problema de tratar la depresión en los hombres con disfunción eréctil es que los medicamentos que se suelen recetar para la depresión, los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, pueden provocar una disminución de la libido o un retraso de la eyaculación.
Por lo tanto, los hombres deben informar a su médico de cabecera o a su consejero de salud mental sobre sus problemas de disfunción eréctil para que puedan intentar recetarles un medicamento con menos efectos secundarios sexuales.
Problemas de pareja
Si el resentimiento o la frustración se acumulan en una relación a lo largo del tiempo, estos sentimientos pueden afectar a la disfunción eréctil.
Si tienes problemas de pareja, este estrés contribuye a la disfunción eréctil, pero eso no significa que la disfunción eréctil sea culpa tuya o de tu pareja. Puede significar que ambos necesitáis encontrar nuevas formas de mejorar vuestra relación.
Al hablar de temas delicados como la disfunción eréctil, uno o ambos miembros de la pareja pueden retraerse porque temen que hablar de ello empeore las cosas.
Evitar el tema puede parecer que protege la relación, pero en realidad puede empeorar la ruptura.
Busque ayuda de un psicólogo o terapeuta sexual para averiguar cómo puede mejorar su relación.
Ansiedad relacionada con la actividad sexual
Después de un episodio de disfunción eréctil, puede existir el temor de que vuelva a ocurrir. Esto puede provocar ansiedad por el rendimiento y presión para rendir.
El cerebro puede percibir la disfunción eréctil como un fracaso.
Cuando un hombre intenta repetir un encuentro sexual, tanto el cuerpo como la mente subconsciente restringen la excitación e impiden que se produzca una erección, lo que conduce a un ciclo de disfunción eréctil.
Muchos hombres sufren ansiedad de rendimiento sexual cuando comparan su rendimiento con lo que se ve en las películas porno.
El deseo de imitar lo que se ve en películas para adultos muy artísticas y exageradas puede provocar ansiedad y disfunción sexual.
Consejos para tratar la salud mental y sexual
La disfunción eréctil puede afectar a la calidad de vida de un hombre y provocar problemas de autoestima y autoimagen, así como depresión.
Por eso es importante buscar formas de mantener la salud mental al tiempo que se mejora la salud sexual. Existen estrategias que le ayudarán a mejorar ambas.
Reducción del estrés
Dado que el estrés crónico puede causar disfunción eréctil, tomar medidas para controlar y reducir el estrés puede ayudar a mejorar la función sexual.
En un estudio, los participantes siguieron un programa de control del estrés de ocho semanas que incluía ejercicios de respiración diafragmática, relajación muscular progresiva y conversaciones de apoyo con otras personas.
Los resultados mostraron una mejora significativa en la percepción del estrés y la función eréctil.
Hable con su pareja
Hablar con su pareja es una parte importante para hacer frente al estrés de la disfunción eréctil. Una pareja de confianza está dispuesta a ayudarle y apoyarle. Hablar del problema puede incluso ayudarle a conectar si lo aborda como un equipo.
Conexión sensual frente a conexión sexual
Cuando se trata de intimidad física, las relaciones sexuales son sólo una parte de ella. Otros actos físicos como tocar, acariciar y besar pueden ayudar a nuestro cerebro a producir oxitocina, la hormona del vínculo y el apego.
Algunas opciones a tener en cuenta son:
Tiempo sensual y pensar en el sexo de una forma ligeramente diferente para aliviar la tensión. Compartir actividades sensuales como ducharse, masturbarse mutuamente o añadir juguetes sexuales a sus experiencias sensuales.
Enfoque sensual como apoyo a la técnica sexual para reducir la ansiedad durante los encuentros sexuales.
El enfoque sensual hace hincapié en la intimidad a través del tacto y la comunicación y elimina la presión sobre un resultado sexual concreto.
En general, puede ayudar a mantener la mente abierta y explorar nuevas vías de intimidad física.
Cuerpo y mente
Cuidar el cuerpo y la mente puede ayudar a mejorar la disfunción eréctil. Haga ejercicio, muévase y haga otras cosas divertidas para mantenerse activo. Un corazón y unos vasos sanguíneos sanos están directamente relacionados con una mejor erección.
El consumo de drogas y alcohol puede empeorar la disfunción eréctil. Abstenerse del alcohol, la nicotina, la marihuana y la cafeína puede ayudar a mejorar la disfunción eréctil y reducir el estrés.
Buscar tratamiento
A menudo se enseña a los hombres la importancia de cuidarse y ser fuertes. Esto puede dificultar especialmente la búsqueda de ayuda.
Sin embargo, no buscar la ayuda necesaria para tratar problemas como el estrés y la disfunción eréctil prolonga el sufrimiento tanto de los hombres como de sus parejas.
También es importante informar al médico de cabecera sobre los problemas de disfunción eréctil, ya que ésta puede ser indicio de otros problemas de salud, incluidos los cardiovasculares.
Terapia
Hablar con un psicólogo o terapeuta es una parte importante del tratamiento de la disfunción eréctil y se ha demostrado que es más eficaz en combinación con medicación que la medicación sola.
Existen muchos tipos de profesionales de la salud mental, desde terapeutas matrimoniales y familiares hasta terapeutas sexuales. Considere la posibilidad de trabajar con un profesional, quizá con su pareja.
Decidir si tomar medicación
A la hora de tomar medicación, puede tratarse de un trastorno de salud mental, de disfunción eréctil o de ambos.
Por lo tanto, es importante que hable abiertamente con su médico sobre cualquier problema que esté experimentando.
Una clase de medicamentos llamados inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina se utilizan habitualmente para tratar la depresión y la ansiedad.
Estos medicamentos pueden ayudar a tratar la ansiedad o el estrés que causan disfunción sexual. Sin embargo, este tipo de medicación también puede causar otros problemas con la función sexual, como libido baja o eyaculación retardada.
Otra opción es centrarse únicamente en la disfunción eréctil y empezar con medicamentos orales como los inhibidores de la FDE-5.
En un estudio se observó que los hombres con disfunción eréctil y síntomas depresivos que no estaban recibiendo tratamiento para su depresión experimentaron una disminución de los síntomas depresivos y una mejora de sus relaciones cuando tomaron inhibidores de la FDE-5.
A menudo se requiere una terapia dual para tratar un trastorno mental y la disfunción eréctil. La terapia combinada con medicamentos para la disfunción eréctil, incluidos los inhibidores de la FDE-5 como el sildenafil o el tadafil, puede ser beneficiosa.
Tratamientos alternativos
También puede considerar tratamientos alternativos para la disfunción eréctil que le ayuden a aliviar el estrés.
Por ejemplo:
- Ejercicios de respiración
- Meditación
- Acupuntura
- Preparados a base de plantas
¿Por qué el estrés es una causa fisiológica de disfunción eréctil?
El estrés parece suprimir la función sexual. Esto se debe a que el estrés disminuye los niveles de esteroides sexuales, reduce la motivación y el deseo sexual y deteriora la función eréctil.
Los estudios han relacionado la disfunción eréctil con los niveles elevados de estrés físico y emocional que manifiestan los participantes.
¿Cómo puedo superar la ansiedad ante la actividad sexual y la disfunción eréctil?
Una de las mejores formas de superar el miedo a la actividad sexual es centrarse en la sensación. Centrarse en las sensaciones implica ralentizar las relaciones sexuales y moverse muy despacio con la pareja.
Se trata de vivir el momento y disfrutar de una experiencia sensual, en lugar de centrarse exclusivamente en el orgasmo y el coito. Esta técnica está diseñada para acortar el ciclo de ansiedad por el resultado.
¿Cómo pueden ayudar los terapeutas con el estrés y la sexualidad?
Los tratamientos más comunes para el estrés y la sexualidad incluyen terapias cognitivo-conductuales para individuos y parejas.
Otras terapias que pueden ser útiles son la terapia de grupo y la terapia de atención plena.
Varios estudios han descubierto que combinar el bienestar psicológico con la medicación mejora los síntomas de la disfunción eréctil y los niveles de ansiedad en comparación con la medicación sola.
Conclusión
El propio hombre debe reconocer el problema y buscar ayuda. Es necesario excluir las causas orgánicas de la disfunción eréctil, y para ello está indicada una consulta con un urólogo y un andrólogo. También es posible consultar a un psicólogo, sexólogo y otros especialistas.
Aunque al principio pueda resultar incómodo hablar con el médico sobre la disfunción eréctil, se trata de una conversación muy importante.
Pueden ayudar a tratar la disfunción eréctil y sugerir formas de reducir el estrés asociado a ella. Con tratamiento, la mayoría de las personas pueden disfrutar de una vida sexual sana y satisfactoria a medida que envejecen.
Fuentes
- Topdoctors. Relación entre miedo, estrés y disfunción eréctil, ¿cómo conseguir mantener la erección?
- Scielo.Isciii. Disfunción eréctil de origen psicógeno